Nadie en nombre del “amor” tiene el derecho de joderte la vida. Es cierto que “joderte la vida» es algo que se siente, por lo tanto es una emoción que se produce a través de unos pensamientos que se generan en ti. Y en teoría, siendo una persona emocionalmente muy fuerte, podrías llegar a que no te dañaran. Estamos de acuerdo.
Voy a hablaros primero del maltrato psicológico.
Os pongo unos ejemplos que se producían de manera recurrente en una mis relaciones, la cuál duró más de 4 años. Estos eran comentarios que me hacía ella, como digo, de manera recurrente:
- Eres muy feo. Te veo y cada vez me resultas más feo. Me puedes follar ahora que me apetece, porque eso si me gusta de ti, pero en realidad eres muy feo.
- No sé que coño hago contigo.
- Mi ex era mucho más guapo que tú y más alto.
- Tienes buen cuerpo pero parece que estas recortado.
- No sabes hablar. La gente no te escucha cuando hablas.
- Mi ex era el centro de atención. El líder de la manada. Como tu no puedes serlo, te pones nervioso.
- En realidad estás loco. Te viene de familia.
- No sabes discutir. En realidad no sabes ni qué decir. No tienes argumentos. Cuando te pones nervioso (por la falta de argumentos) miras de un lado al otro con cara de loco.
- Tu no tienes amigos. No te quieren realmente. Esos amigos que tienes no valen nada.
- No tienes ni pizca de inteligencia social. La gente no quieres estar contigo. Si estamos con alguien de vez en cuando es por mí.
- A veces creo que eres tonto.
- Eres un inseguro. Se te me manifiesta cuando hablas con la gente.
- …

Tenéis que recordar que en aquel momento era “r”. No sabía identificar todo lo que me estaba pasando y no sabía por qué ella era capaz de hacerme tanto daño. Lo que yo hacía, como buen dependiente bobo, era ver su “verdad”, culpabilizarme y sí, tengo que admitirlo, no hice nada mas que balbucear para defenderme.
La dejé por un momento de lucidez a la vuelta del entierro de mi tío, unos meses antes de nuestra boda. La muerte de mi tío me había dejado muy tocado, porque tengo la mala costumbre, derivado de una profunda empatía, de meterme en los sentimientos de los demás, y claro que no es que no me afectara la muerte de mi tío, por supuesto, pero se acrecentaba porque las emociones de los demás se colaban en mí.
Mi hermana pequeña viajaba conmigo en la vuelta. Y cuando le conté apenas unas cuantas cosas de lo que me estaba pasando me dijo: “¿Qué me estas contando? ¿Perdona? ¿Qué haces con ella?”. Y eso me tocó profundamente. Efectivamente mi querida hermana, que razón tenías. Te agradezco de corazón que me abrieras con esa simpleza los ojos, porque ahí empezó este camino que ahora recorro con esfuerzo, y con mucha ilusión.
Llegué al piso que compartía con ella y lo dejamos. Sin marcha atrás. A mí me cuesta tomar decisiones pero si es verdad que cuando las tomo, las tomo. Total que se fue de casa al día siguiente y me apresuré a cancelar la boda lo antes que pude.
Después de que se pasara los primeros días echándome cosas en cara y bombardeándome el whatsapp, creo que empezó a darse cuenta de que con el mismo discurso no podría hacer ya nada. Y no consiguió nada. Pasadas dos semanas vino a verme y me contó “su verdad”, la cual me dejó atónito.
Me contó que yo era el hombre de su vida, que jamás había estado tan enamorada por nadie como lo estaba por mí, que en realidad ella era la que se sentía insegura, por debajo de mí, que lo que ocurría era que no sabía como gestionar mi apatía, que creía que ella era simplemente un accidente mi vida, que en realidad yo podría haber estado con cualquiera, que en realidad, si esa noche que nos conocimos hubiera conocido a otra tía más guarra me hubiera ido con ella, que físicamente no podría gustarle más… en fin. ¡¿¿Perdona??!
Mirad en aquel momento me quedé estupefacto. Pero ¿cómo narices se puede pensar de esa manera y actuar de otra? Cojones, yo pensaba que no estaba del todo fino de la cabeza… pero esto ya se salía de madre.
Hay gente que opina de manera un tanto mística que esas personas se te ponen en el camino para que las conozcas y aprendas a base de las lecciones que sobre ti mismo que te dan. Yo no soy nada místico y no creo para nada en el destino, pero lo que sí sé, es que tu buscabas a esas personas. Ellas simplemente acudieron a absorber de esa fuente de ambrosía a cero coste. Gratuitamente.
Y ya me voy a ir acercando a la conclusión. Queridos amigos y acompañantes de viaje:
— Nunca jamás en vuestra vida, permitáis que nadie os maltrate, de ninguna manera.—
Es cierto que yo no estaba bien, pero eso no es excusa. Nadie, y nadie es nadie, tiene ese derecho y lo peor de todo: ¡no se lo deis! Pensad que esto os lo cuenta una persona que queréis… (y ese el puto problema de raíz: que no os queréis) ¿No os entrarían ganas de darle una buena ostia? Y decirle. ¡Despierta amigo despierta! (cogiéndole de una mejilla y levantándolo de la mesa). ¡La vida está ahí! ¡Justo en frente!
Vuelvo que me descentro… Quizás la relación hubiera salido de una manera totalmente diferente si yo hubiera estado totalmente bien, satisfecho de mi mismo, siendo un puto hombre en vez de un niño miedoso, pero eso nunca lo sobremos. Quizás a lo mejor en ese punto no habría estado con ella, muy probablemente.
El tema es, si te encuentras en una situación parecida tienes que darte cuenta de dos cosas fundamentales:
- Esa persona no es beneficiosa, es tóxica y no se merece que tú, estés con ella. Déjala inmediatamente.
- Tienes que trabajar en ti mismo para hacerte emocionalmente más fuerte. Así que ponte manos a la obra porque ¡no hay tiempo que perder! ¡Hay mogollón de sitios bonitos que disfrutar, gente maravillosa (y sana) que conocer! No te conformes con una relación de mierda.
Amigos, de verdad, escuchad: no hay una persona más importante en tu vida que tú mismo. Mírate al espejo por la mañana, y dilo ¡alto y claro! Ponte carteles de esos típicos de auto-ayuda, ponlos en tu espejo y en las paredes:
TU ERES UNA PERSONA MARAVILLOSA Y VAS A SER FELIZ.
Por favor ¿se puede ser más bobo que permitir esto? En serio, si esto te lo dijera tu hijo, ¿qué harías? Actúa igual. Reacciona igual que lo que esperarías que hiciera esa persona que quieres. Pero atento, esa persona a la que debes ayudar y hacer que entre en razón: ERES TU. ¡Por favor! ¿Que venga una persona y te pisotee, y encima tu te creas que es culpa tuya? ¡Ponte las gafas de inmediato! ¡Las necesidades de amor y de cariño te están dañando y tu lo estás permitiendo!
Voy a resumir las tres grandes verdades que veo en mi post:
- No dejes que nadie te pisotee. Déjala y después ponte a trabajar en ti mismo. Convéncete de una vez: no estas preparado para una relación. Deja de seguir mendigando afecto.
- Tienes que trabajar es tu autoestima. Todos los putos días. Trabaja activamente para convertirte en tu mejor amigo.
- Una extra: tenía razón que podría haber sido otra. Era “r”, un dependiente y cualquier persona energética me hubiera venido bien.
Y mirad, una clave que hay en el ser humano que me ayuda a comprender por qué ocurren las cosas: el ser humano busca satisfacer sus necesidades y anhelos. Todos y cada uno de nosotros, de una manera u otra, lo hace. Si tú dices a todo que sí, todo te viene bien y te acoplas a tus amigos, a tu pareja, a cualquiera, porque eres un jodido dependiente, no estas trabajando para ti, y sentirás que se aprovechan constantemente de ti. ¿Recordáis lo que ha salido aquí una y otra vez? ¿Hola? Sí, serás una vez más: la víctima. Depositarás una y otra vez expectativas en la gente que la mayoría no se cumplirán, acumularás frustración. Para de una puta vez.
Estas trabajando, y gastando valiosa energía, para satisfacer a los demás. Date con un canto en los dientes… tienes suerte si has dado con personas medianamente “buenas», si dieras con las malas, te habrían desplumado seguramente, te podrían haber maltratado físicamente, o meterte en un embolado mayor con mayores consecuencias: como hacer un niño.
Simplemente Dí NO. Dí BASTA YA. Para de una vez tu autodestrucción.

Solo hay un momento para tomar la decisión. Para dar el gran salto hacia una nueva consciencia de tu propio SER, para trabajar en sanar de una vez tus heridas.
Ese momento es ahora.
— ¿Quieres empezar a vivirlo? —
1 Comment